PLD critica presunta falta de transparencia en manejo de bonos navideños

Temístocles Montás | Foto: Yohan Castillo

El vicepresidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Temístocles Montás, cuestionó este jueves la transparencia del Gobierno en el manejo de los recursos públicos destinados a programas de asistencia social, particularmente en la distribución de los bonos navideños.

Montás citó como ejemplo la práctica del coordinador del Gabinete de Política Social, Tony Peña Guaba, a quien señaló por participar de manera personal en la entrega de los RD$1,500 millones asignados al programa de bonos navideños, dirigidos a familias de escasos recursos.

Mediante un comunicado, el dirigente peledeísta planteó una serie de interrogantes sobre el proceso:
“¿Puede considerarse transparente que un funcionario reparta, de manera personal y discrecional, beneficios financiados con fondos públicos? ¿Quién garantiza que ese funcionario no retiene una parte de los recursos destinados a esos bonos?”, cuestionó.

Aclaró que estas inquietudes no surgen de la malicia, sino de la ausencia de mecanismos claros que permitan descartar posibles irregularidades.

“En un Estado democrático, la transparencia no descansa en la confianza subjetiva, sino en la trazabilidad, la documentación y el control institucional”, afirmó.

Montás recordó que República Dominicana ha avanzado en la implementación de sistemas más modernos y controlados de asistencia social, por lo que consideró un retroceso observar a un funcionario entregando sobres o tarjetas como si se tratara de bienes personales.

“La práctica del señor Peña Guaba no solo debilita los controles básicos del gasto social; también genera confusión entre la función pública y la construcción de capital político. Cuando un alto cargo aparece entregando recursos a personas vulnerables, la línea que separa la asistencia institucional del proselitismo se vuelve difusa”, sostuvo.

Asimismo, enfatizó que la política social debe regirse por criterios profesionales, impersonales y verificables, lo que implica procesos formales, mecanismos institucionales de entrega y sistemas electrónicos que permitan la trazabilidad, eliminando cualquier margen de discrecionalidad.

“No basta con que el gobierno afirme que actúa correctamente; la confianza pública requiere garantías verificables, no simples declaraciones”, puntualizó Montás, al tiempo que consideró pertinente conocer la opinión de la directora general de Ética e Integridad Gubernamental, Milagros Ortiz Bosch, sobre esta situación.